domingo, 12 de febrero de 2023

Malta

 


Capital: La Valeta

Isla del Mediterráneo


Al ser una isla, la gastronomía de Malta está muy ligada a los alimentos estacionales que pueden conseguirse en su tierra, pero además está influenciada por todos los pueblos que han pasado por allí, como italianos, españoles, magrebís o ingleses. La base de la gastronomía está en el arroz, la pasta y el pan. Las verduras se consumen frescas o cocinadas y, al igual que las legumbres suelen variar según la estación. Al se una isla se consume mucho pescado y marisco, cocinados de forma sencilla, como a la parrilla. La carne más popular es la de conejo, aunque también se come carne de ternera, pollo y cerdo y caracoles. Para el postre son muy típicos los pastelitos de influencia árabe, rellenos de dátiles, frutos secos y especias. Las comidas se suelen acompañar con vino y se finalizan con té con leche o café. Malta huele a cebolla, a ajo, a tomate, a estragón, a alcaparras, a pan, a queso, a sopa de marisco, a pescado a la parrilla, a conejo guisado, a dátil, a chocolate, a canela y a naranja.


Sopa de cangrejos tal-grottli

Pudin tal-hobz








Cuando la Orden de Malta comenzó a gobernar la isla, el Gran Maestre prohibió la caza del conejo en sus tierras, bajo pena de ser enviado a servir en las galeras de los monjes. Cinco siglos después, dada la actividad reproductiva de los conejos, estos animalitos se habían convertido en una plaga que asolaba la isla y tuvo que levantarse la prohibición. Desde entonces, además de ser un alimento habitual en la cocina maltesa, se utiliza para preparar una gran variedad de platos (fenkata) durante la Imnarja o fiesta de la Luminaria, que se celebra en los bosques y jardines que rodean Mdina cada 28 de junio.


Fenek stuffat

Ingredientes para 2 personas:











  • 1 conejo
  • 1 vaso de vino blanco
  • 3 dientes de ajo
  • 1 hoja de laurel
  • 1 ramita de romero
  • 3/4 de vaso de caldo de carne
  • 125 g de guisantes
  • Aceite
  • Sal
Se trocea el conejo, se sala y se marina con el vino, los dientes de ajo pelados y el laurel. Si el conejo no queda cubierto, se completa con agua. Se deja macerar al menos 1 hora.

Se fríe el conejo hasta que esté dorado. Se laminan los ajos del macerado y se saltean hasta que cojan un poco de color. Luego se añade el resto del macerado y la rama de romero y se deja hacer unos 10 minutos, para que se reduzca el alcohol.

Después se añade el caldo y los guisantes y se cocina hasta que la salsa se reduzca.


Este plato puede acompañarse con pan o manzanas fritas, o utilizarse para rellenar una masa, como una empanada. Profitt tajjeb!